sábado, 11 de julio de 2009

William Blake

William Blake retratado por Thomas Phillips

Hasta donde mi memoria alcanza, siempre me he sentido fascinado por este poeta, grabador, pintor, místico y visionario londinenese, nacido en 1757 y muerto en 1827. Y lo de visionario no lo digo sólo porque camuflara en sus místicos poemas su ideología y sus acertadas predicciones futuras concernientes a la política y la organización de la sociedad, sino por las visiones de seres "celestiales" que tuvo desde su más tierna infancia. Creó su propia cosmogonía con personajes totalmente nuevos o inspirados en la Mitología clásica y la Biblia, como el propio Urizen, demonio del cielo creador de hombres a los que esclaviza mediante sus constantes leyes que no para de escribir con las 2 manos y que condenaban la revolución y la imaginación creando una opresora religión basada exclusivamente en la razón, siendo probablemente un posible análogo a Yahvé. Incluso se ha considerado santo por los gnósticos.
Consiguió instruir a su analfabeta esposa, Catherine Boulcher, mujer que acabó siendo una inestimable ayuda para Blake, ayudando a imprimir sus trabajos iluminados y manteniendo su alegría estable tras numerosas desgracias. Su matrimonio, sin hijos, continuó fiel y afectuoso durante el resto de su vida.
Blake fue un revolucionario para su época. Aborrecía la esclavitud y creía en la igualdad sexual y racial. Conservó un interés activo en los acontecimientos sociales y políticos durante toda su vida, aunque a menudo se vio forzado a disimular el idealismo social y transformar las declaraciones políticas en alegorías místicas protestantes. Rechazó toda forma de autoridad impuesta. De hecho, fue acusado por asalto y por pronunciar expresiones sediciosas y de traición contra el Rey en 1803, pero fue absuelto de estos cargos. Tenía puestas grandes esperanzas en las revoluciones francesa y americana y acostumbraba a llevar una gorra roja como señal de solidaridad con los revolucionarios franceses, revoluciones que sonsideraba lógicas a pesar de las guerras debido al exceso de la Ilustración racionalista que fomentaba un caldo de cultivo antagónico a dicho movimiento. Sus opiniones sobre la opresión y la restricción de libertades se extendían a la Iglesia, despreciando la castidad y considerando que el Antiguo y el Nuevo Testamento eran prácticamente opuestos (lógico, por otra parte...). Rechazaba las restricciones del dios del Antiguo Testamento, mientras que consideraba al dios del Nuevo Testamento como una influencia positiva, a pesar de lo cual, o tal vez por eso mismo, sentía atracción por todo lo relacionado con el infierno, la revolución y las estúpidas represiones, rechazando además el dogma de la Trinidad. En diversas ocasiones le encargaron ilustrar diversos pasajes de la Biblia, utilizando unas técnicas pictóricas influenciadas por sus admirados Rafael y Miguel Ángel, artistas que no gozaban entonces de igual reconocimiento que otros pintores, pero a los que Blake sonsideraba superiores a la moda imperante.
Personalmente me atrae más su literatura, pero es indiscutible que su pintura y su literatura eran complementarias e iban de la mano. Y a pesar de ser ateo, pero fascinado desde siempre por la iconografía religiosa, nunca me canso de leerle o admirar sus cuadros.

"Abel"


"Ancient of days"


"El Diablo cubre de pústulas a Job"


"El fantasma de una pulga"


"El infierno de Dante"


"Elohim creando a Adán"


"La escalera de Jacob"


"Newton"


"The number of the Beast is 666"

Algunos de mis favoritos "Proverbios del Infierno", de "El matrimonio del Cielo y el Infierno":
"El camino del exceso conduce al palacio de la sabiduría."
"Quien desea pero no obra engendra peste."
"La Eternidad está enamorada de los frutos del tiempo."
"Lo que hoy es evidente una vez fue imaginario."
"Quien ha soportado que abuses de él, te conoce."
"Espera veneno del agua estancada."
"Nunca sabrás lo que es suficiente a menos que sepas lo que es más que suficiente."
"Antes asesina a un niño en su cuna que nutras deseos que no realices."

"El Jardín del Amor", de "Cantos de experiencia":

Fui al Jardín del Amor,
y vi lo que nunca había visto:
habían erigido una capilla en su centro,
en el prado donde solía jugar.

Las puertas de la Capilla estaban cerradas
y en ellas estaba escrito "Te es prohibido";
Entonces entré al Jardín del Amor
que tantas dulces flores poseía;

Y vi muchas tumbas y piedras sepulcrales
allí donde las flores debían estar;
Y Sacerdotes que en negras sotanas seguían sus senderos,
y ataban con zarzas mis deseos y alegrías.


4 comentarios:

  1. Genio sin paliativos. Lo conocí gracias a Jim Morrison y Aldous Huxley (poco original, ¿no?).
    "Si las puertas de la percepción se abriesen..."

    ResponderEliminar
  2. Como estimula escribir sobre los que te inspiran, muy interesante, me pregunto como lo veian en su epoca, aveces pienso que en este pais se ha retrocedido desde entonces.

    ResponderEliminar
  3. Me pregunto que seria de el, viviendo en en estos tiempos, seria venerado, envidiado u odiado. Sin duda su época no fue la mejor para vivir, pero todos en definitiva, alguna vez pensamos que no estamos en el sitio correcto...

    Abrazzzusss

    ResponderEliminar
  4. Un adelantado para su época. Fascinante personaje.

    ResponderEliminar