Este pasado domingo 15 de agosto fotografié la manifestación antitaurina que cada año se realiza en Donosti coincidiendo con las matanzas de toros en una plaza construida para tal fin, organizada este año por Liberacción/Askekintza Animalista (web en construcción), asociación de la que soy miembro. La multitudinaria manifestación antitaurina comenzó a las 18:00 y tras un largo recorrido finalizó a las 19:00 en el mismo punto de partida, el Boulevard.
Una vez más ha quedado demostrado que los antitaurinos y antiespecistas somos 4 gatos... No puede caber duda al respecto al observar la poca gente que se ve en estas fotografías...
Una vez más ha quedado demostrado que lo único que nos mueve es un afán separatista y antiespañolista... No puede caber duda al respecto al ser uno de los lemas de la manifestación, en concordancia con ese exacerbado amor a nuestra tierra, ¡¡¡CATALUNYA ANTITAURINA, DONOSTI ASESINA!!!
Una vez más ha quedado demostrado que los radicales, intransigentes y violentos, obviando la radicalidad y violencia de quien disfruta torturando, que no es más que un pequeño detalle, somos los antitaurinos y animalistas. No puede caber duda al respecto al haber sido un pacífico manifestante agredido por un taurino a lo largo del recorrido de la manifestación...
Y mientras tanto en la tele no paran de darle bombo al asunto al desviar el tema de nuevo hacia los independentismos. Hoy han insultado al presidente de la asociación en defensa de los derechos de los animales de Euskadi (como sólo hay una...) al haber declarado que Jesulín de Ubrique debería ser condenado al igual que un etarra. Lo han insultado incluso los que sostienen que la tortura animal debe figurar en el código penal, y quien no lo ha insultado se ha escandalizado. Que se escandalice quien quiera, pero suscribo sus palabras, porque todo aquel que mata por placer a otro ser sintiente, humano o no, debería ir a la cárcel.
Todo esto está resultando muy positivo. Todos los informativos y programas televisivos no paran de criticar este actual furor animalista y diversas manifestaciones antitaurinas, aunque no tienen nada de nuevo porque existen desde que tengo uso de razón, así como no paran de hablar de la prohibición de otras fiestas en las que se maltratan animales en diversos pueblos. La única razón es que están asustados de comprobar que los que creían una minoría somos una mayoría, aunque las mayorías y las minorías no deberían de importar a la hora de prohibir toda clase de tortura de manera que los humanos se legislen a sí mismos y la convivencia entre ellos dejando en paz a las demás especies animales.
Esto es imparable, señores especistas...
Quizás el ejemplo del Pais Vasco sea particularmente sangrante. Un lugar que conjuga un antiespañolismo feroz y a la vez tan taurino, al igual que Navarra. Hasta Jon Idigoras quiso ser torero. Que los taurinos expliquen eso.
ResponderEliminarya shā' Illah!!!
ResponderEliminar¡Cada vez somos mas¡.....El tiempo nos dará la razón y a l@s salvajes les pondrá en su sitio, el pasado.
ResponderEliminarNo hay quien lo pare, es una avalancha de voces en contra de la tortura.