La gran Diamanda Galás, una de las mayores joyas del arte contemporáneo, realizó el 15 de septiembre del pasado año una performance en el Museo Emanuel Vigeland de Oslo, Noruega. Dicha performance consistió en el canto a capella del poema "Espergesia" de César Vallejo musicalizado por la propia Diamanda, tras volver a estar en el candelero gracias a las lecturas en el Weaving Politics Symposium en Estocolmo de sus propios textos "In the Mouth of the Crocodile", textos que como es habitual tratan sobre aspectos como el arte del criticismo, la vida y la muerte, cuya grabación reproduzco también junto al retrato de Diamanda tomado por Allan Nilsson durante el acto. En ambos actos, sin ningún vestuario ni puesta en escena espectacular como en otras ocasiones, pone los pelos como escarpias gracias sus siempre controvertidas palabras, al movimiento de su cuerpo, su fuerza y su espectacular voz innata, pero lo que es más importante, cómo utiliza esa voz y lo que hace con ella, en esta ocasión en este resonante Mausoleo de Emanuel Vigeland con un retardo sonoro de 20 segundos, ya que ésa, la de mausoleo, fue la primera función del museo, tratándose de una zona umbría completamente cubierta de frescos y una pintura de 800
metros cuadrados, VITA (la vida), que representa escenas dramáticas desde
la concepción hasta la muerte del ser humano.
Disfrutad, o padeced, como prefiráis. O mejor dicho, compadeced, es decir, padeced con Diamanda y con aquellos a los que les da voz por habérseles sido robada, ya que Diamanda cree en el gran poder de la empatía.
Una vez dijiste, Diamanda, que nunca dejarías de trabajar hasta el día de tu muerte que sería muy tardía, frase que formulaste casi en forma de amenaza. Ojalá mis ojos sigan viéndote y mis oídos sigan escuchándote hasta el día de esa lejana muerte.
"In the Mouth of the Crocodile"
"In the Mouth of the Crocodile"
"Espergesia"
Yo nací un día
que Dios estuvo enfermo.
Todos saben que vivo,
que soy malo; y no saben
del diciembre de ese enero.
Pues yo nací un día
que Dios estuvo enfermo.
Hay un vacío
en mi aire metafísico
que nadie ha de palpar:
el claustro de un silencio
que habló a flor de fuego.
Yo nací un día
que Dios estuvo enfermo.
Hermano, escucha, escucha...
Bueno. Y que no me vaya
sin llevar diciembres,
sin dejar eneros.
Pues yo nací un día
que Dios estuvo enfermo.
Todos saben que vivo,
que mastico... y no saben
por qué en mi verso chirrían,
oscuro sinsabor de féretro,
luyidos vientos
desenroscados de la Esfinge
preguntona del Desierto.
Todos saben... Y no saben
que la Luz es tísica,
y la Sombra gorda...
Y no saben que el misterio sintetiza...
que él es la joroba
musical y triste que a distancia denuncia
el paso meridiano de las lindes a las Lindes.
Yo nací un día
que Dios estuvo enfermo,
grave.
www.diamandagalas.com
collons! pone los huevos por corbata, jaja!!
ResponderEliminarMe sigue causando desasosiego y también me sobrecoge. No parece de esta época; es más como alguien del pasado. O puede que sea del futuro, no sé muy bien. Además, suena como si hubiera una legión de seres dentro de ella. Puede que no pertenezca al mundo terrenal. Es poco común.
EliminarUno de mis amigos de hecho se quedó sorprendido porque aseguraba que no podía ser humana ya que emitía un tono grave junto a otro agudo al mismo tiempo, en el mismo momento de emitir el sonido. Tengo su discografía completa y la he visto 2 veces en directo. Es lógico que te produzca desasosiego, porque eso es lo que pretende, que seas capaz de sentir lo que puede sentir por ejemplo un exiliado político, la víctima de un genocidio, un enfermo de SIDA terminal o un enfermo mental recluido, grupos con los que ha trabajado y no sólo desde la distancia.
EliminarTiene tintes del pasado. De hecho creo que en el pasado sería mucho más valorada. Por algo es comparada con Maria Callas, por ejemplo, y ha dado recitales de piano de música clásica, pero en ninguno de los 2 casos ha querido ser una clasicista "imitadora", quería hacer con su voz, su cuerpo y el piano algo diferente y hacer arder el escenario cono Jimmi Hendrix (sic). Eso, y que esté totalmente fuera del circuito comercial convencional, junto a sus ideas que en este caso yo por lo menos sí que considero revolucionarias aunque se inspiren en tradiciones de sociedades antiguas, también hace que sea más bien del futuro. De todas maneras aparece constantemente en todas las revistas del mundo, no para de hacer giras y aunque hay millones de personas que no saben quién es, tiene una horda de fans incondicionales que se presentan en sus conciertos, o performances, depende del caso, a un bajísimo precio en primeras filas (yo la vi en el 2007 en l'Auditori de Barcelona y en el 2008 en el Teatro Albéniz de Madrid en tercera fila por unos 20€). Allí se presentan tanto curiosos como góticos y gente de ya avanzada edad vestida de esmoquin dispuesta a admirar a una cantante de ópera aunque muy inusual por cómo desgarra la voz y pasa de soprano a bajo, y a una gran pianista aunque se dedique a aporrearlo y darle golpes a modo de percusión llegando incluso a dejar sangre en el piano. Lo que se suele decir es que en cualquier caso lo común en todo el público es que como ella, todos vamos vestidos de negro. En el concierto de Madrid había gente como Rafael Amargo entre otra gente conocida. Hasta su risa da miedo, ya que en ese concierto la llamaron tía buena y soltó una carcajada que ponía los pelos de punta, para luego dar las gracias. En las entrevistas resulta muy cálida y simpática, pero como le toques los cojones te mete una hostia, cosa que ya le hizo a un periodista.
Esperaba otra cosa, sorprendido, dependiendo del momento, dependiendo de mi estado, en este momento ganas de corearlo, en otras quizas necesite de algo menos sobrecogedor...
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